No existe ninguna estadística exacta que permita respaldar esta información, pero la memoria popular también reclama su peso cuando se trata de recordar fechas inaplazables.
El cumpleaños del cantautor guajiro Diomedes Díaz es, sin lugar a dudas, el más recordado de la farándula colombiana.
A estas alturas puede decirse, sin temor a equivocaciones, que la mayoría de fanáticos del estilo vallenato no sólo se acuerdan de qué significa el 26 de mayo, sino que también lo celebran como si el cumplimentado aún estuviera físicamente en este mundo.
Es el 26 de mayo el día en que una romería proveniente desde diferentes sitios de la ciudad de Valledupar, confluye en el parque cementerio Jardines de Ecce Homo, para rendir honores, ofrendas florales y canciones a quien consideran lo más grande que dio el canto vallenato en el siglo XX.
Era el 26 de mayo la fecha que Diomedes escogía para hacer el lanzamiento oficial de sus nuevas producciones discográficas, acontecimiento que se hizo tan importante que las autoridades valduparenses decidieron declararlo día cívico.
Para el 26 de mayo, los habitantes de Valledupar y de los pueblos cercanos, ya tenían preparada una muda de ropa nueva, la cual lucirían para acompañar el cortejo que salía desde el aeropuerto Alfonso López Pumarejo hasta la plaza del mismo nombre.
Durante el recorrido a través de las principales avenidas, Diomedes saludaba desde un camión de bomberos, como todo un rey Midas del fervor popular.
A su lado iban sus fanáticos en carros, bicicletas, motos y hasta en carromulas con tal de acompañar al ídolo que les alegraba la vida e interpretaba los pesares públicos a punta de canciones vivenciales.
El bando terminaba en la tarima Francisco el hombre, con un concierto en el que Diomedes estrenaba canciones, complacía al público con las ya conocidas y se desmandaba en una andanada de versos que arrancaban aplausos y alaridos, hasta que desaparecía entre la multitud vibrante y alicorada de alegría.
Nunca más se han visto celebraciones como esas en Valledupar.
Otros cantantes han tratado de calcar el acontecimiento, pero la huella indeleble de Diomedes parece no tener reemplazo en lo más recóndito del alma populachera.
“26 de mayo” es también un paseo vallenato que Diomedes grabara en 1994, al lado de Juancho Rois; y que incluyera en el LP del mismo título.
Pero, como dato curioso, cabe anotar que, a mediados de los años 70, esta canción llegó a las manos de Emilio Oviedo y Rafael Orozco, cuando Diomedes no era más que un desconocido que intentaba surgir como compositor.
El dúo en mención consideró que aún no era tiempo de grabarla, y prefirieron reemplazarla por el paseo “Cariñito de mi vida”, también de la cosecha de Diomedes, cuyos resultados ya ustedes conocen.
“26 de mayo”, cantado a dúo por Diomedes y Rafael Orozco, durante una presentación que ambos ídolos protagonizaron en una caseta del municipio de Patillal, departamento del Cesar, sin duda una de las presentaciones mas recordadas y queridas por los fanáticos.
Esta información y mas en Música del patio, por los 99.5 F.M, domingos con repetición los jueves
Por: Ruben Dario Alvarez
